Programa Ganaderos de Altura impulsa desarrollo sostenible en Cajamarca

Un programa respaldado por la empresa minera Newmont Foncreagro busca potenciar la crianza de ganado vacuno en zonas situadas a más de 3,000 metros sobre el nivel del mar. La iniciativa, que forma parte del proyecto “Ganaderos de Altura”, ha logrado mejorar significativamente la genética y la productividad de los ganaderos en regiones como Cajamarca, Combayo, Aliso Colorado y La Encañada.

Miguel León Bocanegra, juez de ganado vacuno, resaltó que la implementación de tecnologías como la inseminación artificial y la transferencia de embriones ha facilitado avances notables en el desarrollo ganadero. Según explicó, estos métodos permiten acceder a una mayor variedad de semen de alta calidad, lo que brinda a los productores más opciones para mejorar sus rebaños y obtener generaciones con características productivas y reproductivas superiores.

El especialista manifestó que, además del mejoramiento genético, es esencial garantizar que el ganado se adapte al medio ambiente de alta altitud para optimizar su potencial. “No solo buscamos mejorar genéticamente, sino también asegurar que el animal pueda prosperar en esas condiciones, lo cual es crucial para obtener buenos resultados en reproducción y producción”, afirmó.

La colaboración con la iniciativa privada, en particular el apoyo técnico y asesorías brindadas por Newmont Foncreagro, ha sido clave para afrontar los desafíos de la crianza en zonas complejas. León subrayó que estos lugares presentan dificultades particulares, por lo que programas como “Ganaderos de Altura” son fundamentales para elevar la productividad lechera y la economía local en Cajamarca.

Asimismo, resaltó que la ganadería moderna no solo debe enfocarse en la cantidad de leche producida, sino también en la calidad, valorando la concentración de sólidos como grasa y proteína, esenciales para la industria láctea. Por ello, muchos ganaderos están optando por cruces con razas más eficientes, como Fleckvieh o Jersey, para mejorar la calidad de los productos.

Con más de 25 años de experiencia en el país y en el extranjero, León enfatizó la importancia de un juzgamiento técnico y objetivo en las evaluaciones de los animales. “Ser juez implica explicar claramente los fundamentos del veredicto, considerando aspectos como la estructura corporal, la fortaleza dorsal y la amplitud del pecho, siempre adaptados a las condiciones de la crianza en altura”, concluyó.