Protestas violentas en Bolivia por eliminación del subsidio a los combustibles dejan cuatro policías heridos

Protestas violentas en Bolivia por eliminación del subsidio a combustibles

La decisión del gobierno boliviano de eliminar el subsidio estatal a los combustibles ha generado este martes una serie de enfrentamientos en la capital, La Paz. La movilización, convocada por la Central Obrera Boliviana (COB), culminó en choques con la policía en las cercanías de la plaza Murillo, donde se encuentran el Palacio de Gobierno y el Congreso.

Al menos cuatro agentes policiales resultaron heridos y tuvieron que ser trasladados a centros médicos, tras los incidentes. La protesta reunió a diversos grupos de trabajadores, principalmente mineros tanto estatales como privados, además de maestros rurales y obreros de la industria manufacturera. Los manifestantes intentaron ingresar de forma forzada a la plaza Murillo, retirando vallas de seguridad y presionando a los efectivos policiales que resguardaban la zona.

## Escalada de violencia durante la protesta

Durante los enfrentamientos, se escucharon detonaciones de petardos y cargas de dinamita, recursos habituales en protestas mineras en Bolivia. Esto elevó considerablemente el nivel de peligro en una zona muy transitada de la ciudad. La policía respondió utilizando gases lacrimógenos y gas pimienta para dispersar a los manifestantes y evitar que ingresaran al perímetro oficial.

Un oficial policial confirmó que en la protesta se explotaron explosivos: “Han hecho explotar dinamita; se realizará una evaluación médica para determinar las heridas, y ya se activó el traslado en ambulancia”. El enfrentamiento, que duró unos 25 minutos, se concentró en calles clave del centro histórico, como Yanacocha, Comercio, Socabaya y Potosí. Tras la dispersión, los manifestantes se replegaron hacia la avenida Mariscal Santa Cruz, una de las principales arterias de La Paz, que quedó bloqueada varias horas, afectando el tránsito y la actividad comercial en la zona.

## La postura de los gremios y las autoridades

El dirigente de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, Andrés Paye, aseguró que la movilización tuvo carácter pacífico, pero responsabilizó a las fuerzas de seguridad por la violencia. “Le decimos al gobierno y a la policía que no estén gasificando; nosotros estamos aquí y ellos provocan”, expresó, justificando el uso de explosivos como una medida defensiva.

La protesta responde al rechazo al Decreto Supremo 5503, que dispuso la eliminación definitiva del subsidio a la gasolina y el diésel, vigente por más de 20 años. La medida implicó aumentos en los precios del combustible de hasta el 86 % para la gasolina y del 162 % para el diésel. La administración de Rodrigo Paz argumenta que mantener la subvención sería insostenible fiscalmente, ya que en 2026 implicaría un gasto equivalente al 6,4 % del producto interno bruto.

El ministro de Economía, José Gabriel Espinoza, defendió la decisión, llamando a una reducción de la tensión. “Respetamos toda movilización que respete los derechos de otros”, afirmó. Sin embargo, señaló que espera que la situación no vaya más allá de enfrentamientos menores y que pronto retome el diálogo. También criticó que la COB exija la anulación del decreto como condición previa para el diálogo, señalando: “Eso no es diálogo”.

## Conclusiones y contexto

Las protestas dejan en evidencia la polarización en Bolivia respecto a las medidas económicas del gobierno. La eliminación del subsidio ha causado un fuerte rechazo entre los sindicatos mineros y otros grupos sociales, que consideran que impacta negativamente en el costo de vida. La situación aún se mantiene tensa, con las autoridades intentando contener los disturbios mientras permanecen abiertas las negociaciones con los diferentes sectores afectados.