¡Rafael Caro Quintero seguirá en aislamiento extremo en prisión por mantener operaciones criminales desde la cárcel!

Rafael Caro Quintero continuará en aislamiento extremo en prisión en Estados Unidos

La justicia estadounidense confirmó que Rafael Caro Quintero, considerado uno de los principales narcotraficantes mexicanos, seguirá bajo medidas de aislamiento severo en prisión. La decisión se fundamenta en que, desde los centros penitenciarios, el capo ha logrado mantener operaciones criminales con la ayuda de familiares, en especial de su hermano, Miguel Ángel Caro Quintero.

El exlíder del Cártel de Guadalajara enfrenta cargos en Nueva York y permanece en condiciones estrictas tras su extradición a Estados Unidos en febrero pasado. La Fiscalía del Distrito Este de Nueva York argumenta que, pese a estar en prisión, Caro Quintero representa un riesgo constante para la seguridad pública y la integridad del proceso judicial. Según documentos oficiales, el mexicano ha delegado funciones y continúa liderando actividades ilícitas mediante vínculos con familiares en prisión.

## Medidas restrictivas y vigilancia en prisión

Las Medidas Administrativas Especiales (SAM, por sus siglas en inglés) establecen una vigilancia estricta sobre sus comunicaciones y visitas en la cárcel de Brooklyn. Solo personal autorizado y familiares previamente aprobados pueden mantener contacto con él, tras una revisión exhaustiva por parte de las autoridades federales. Estas restricciones buscan evitar que el criminal siga ordenando o coordinando acciones delictivas desde la cárcel.

Durante una audiencia, la defensa de Caro Quintero afirmó que el detenido se encuentra en condiciones de aislamiento extremo: sin ventanas, con la luz encendida las 24 horas, y en confinamiento absoluto casi toda la semana. Solo tiene permiso para realizar llamadas telefónicas cortas, supervisadas, y con visitas limitadas a su equipo legal.

## Riesgo de represalias y antecedentes criminales

La Fiscalía sostiene que estas medidas se justifican por su historial violento y su capacidad para generar represalias contra testigos y funcionarios relacionados con el caso. El fiscal Joseph Nocella indicó que, incluso en prisión, Caro Quintero ha demostrado tener instrucciones para mantener su red de narcotráfico activa, poniendo en peligro la seguridad pública y la integridad judicial.

El caso de Caro Quintero ha sido comparado con el de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, quien también enfrentó condiciones similares en prisión. La estrategia busca evitar que los líderes criminales sigan operando desde la cárcel y que puedan coordinar acciones ilícitas a través de contactos internos o familiares.

Respuesta de la defensa y contexto histórico

La defensa del capo, liderada por Mark DeMarco, asegura que la situación en la cárcel es inhumana. Según ellos, Caro Quintero pasa 23 horas diarias en aislamiento y solo recibe una o dos llamadas cortas por semana, siempre monitoreadas. Además, señalan que las visitas se limitan a miembros de su equipo legal, sin permitir contacto con otros internos.

El equipo legal expresó preocupación por que estas restricciones puedan afectar su salud mental y bienestar. Sin embargo, el Ministerio Público argumenta que dichas medidas son imprescindibles para prevenir amenazas o acciones que puedan dañar a terceros.

El expediente judicial también recuerda que Caro Quintero fue una figura clave en los años ochenta, cuando se produjo la desaparición y asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar. La historia del narcotraficante mexicano está marcada por violencia y operaciones criminales que han tenido repercusiones en ambos lados de la frontera.