¡Skater brasileño rompe récord Guinness al descender en skate desde la cima de un edificio de 89 metros y alcanza más de 130 km

Un hito histórico en el mundo del skateboarding

La comunidad de skate de Porto Alegre tuvo que esperar años para que una leyenda local lograra hacer realidad un sueño. Sandro Dias, conocido como el “Rey de los 540”, realizó una hazaña que quedó registrada en los libros Guinness tras deslizarse desde la cima del Centro Administrativo Fernando Ferrari (CAFF). Este edificio de 22 pisos y aproximadamente 89 metros de altura se convirtió en escenario de un récord que combina velocidad y destreza, llevando el deporte a nuevos límites.

El logro de Dias no solo incluyó completar el descenso más alto en la historia del skate, sino que también implicó alcanzar la mayor velocidad registrada en una patineta estándar: más de 130 km/h. La hazaña, que combina riesgo, precisión y preparación exhaustiva, convirtió a este deportista en un referente internacional y en un símbolo de superación para la comunidad del skate en todo el mundo.

La preparación y los desafíos técnicos

Desde enero, Dias inició un riguroso entrenamiento para afrontar este reto. Su programa incluyó ejercicios físicos específicos y pruebas de velocidad en pistas de aeropuertos, donde pudo alcanzar los 136 km/h. Para simular las condiciones extremas, utilizó un chaleco con 40 kg de peso y monitorizó en todo momento factores como la fuerza del viento y su equilibrio en situaciones de alta tensión. La planificación meticulosa fue clave para garantizar su seguridad y éxito.

El proceso de avanzar en altura fue progresivo. Comenzó saltando desde 55 metros y alcanzó velocidades de 82 km/h, incrementando paulatinamente la altura en tramos de 5 metros. Cuando descendió desde 65 metros, ya había establecido un récord Guinness previo. Durante la caída, soportó fuerzas G que multiplicaron su peso hasta 310 kg y llegó a experimentar hasta 400 kg de fuerza de reacción del suelo, demostrando una resistencia física excepcional.

## La estructura y la rampa más alta del mundo

El edificio CAFF, con su fachada curva, fue durante décadas objeto de memes y bromas en internet, imaginando a un skater deslizándose desde esa altura. La estructura, apodada por los habitantes de Porto Alegre como «la mayor rampa del mundo», se convirtió en el escenario perfecto para esta hazaña. Se instalaron paneles de madera contrachapada a lo largo de la fachada, cubriendo las grietas y desgastes, para facilitar el descenso con seguridad.

La rampa, que supera en altura a cualquier otra construida, fue diseñada con medidas especiales. La superficie temporal no solo protegió la fachada, sino que también proporcionó una plataforma estable para el descenso. Se colocaron barreras de protección similares a las de MotoGP, incluyendo vallas inflables y sistemas de absorción de energía, para minimizar riesgos en caso de caída. El equipo de protección de Dias incluyó un protector de columna vertebral y materiales ligeros, como los de la colección Linea Rossa de Prada, adaptados a las exigencias de la hazaña.

Reacciones y significado del logro

La comunidad internacional del skateboarding expresó su admiración por la proeza de Dias. Ryan Sheckler, reconocido skater estadounidense y amigo del brasileño, afirmó: “Siempre ha estado superando límites. Verlo a sus 50 años haciendo algo así demuestra su amor y dedicación por el skate. Es un ejemplo de que nunca es tarde para desafiarse a uno mismo”.

Para Dias, esta conquista fue mucho más que una simple prueba de valentía. En sus propias palabras, dijo: “Me siento muy feliz. La energía y apoyo de la gente me motivaron a seguir. Fue un desafío que parecía imposible, pero sabía que estaba haciendo algo grande no solo por mí, sino por el skate mundial”.

Este logro no solo destaca la valentía y preparación de Dias, sino que también pone en evidencia cómo el skateboarding continúa evolucionando, rompiendo barreras y alcanzando nuevos récords internacionales. La estructura del CAFF y la audacia del skater brasileño se han convertido en un símbolo de innovación y pasión por el deporte en todo el mundo.