¡Tensión en el Caribe! Maduro denuncia provocación militar y captura de mercenarios ligados a la CIA frente a Venezuela

Venezuela denuncia provocación militar en el Caribe

El gobierno del presidente Nicolás Maduro acusó el domingo a Trinidad y Tobago de realizar una provocación militar, en medio de unos ejercicios conjuntos entre Estados Unidos y esa nación insular frente a las costas venezolanas. La tensión aumentó tras la llegada del buque de guerra estadounidense USS Gravely a Trinidad y Tobago, un pequeño archipiélago ubicado frente a Venezuela.

Caracas expresó su rechazo a estas maniobras, que consideran una estrategia para intensificar la presión internacional sobre Venezuela. La visita del buque estadounidense coincidió con un incremento en las acciones diplomáticas y militares de Washington en la región, en un contexto donde el gobierno estadounidense busca reforzar su presencia en el Caribe y apoyar a sus aliados en la zona.

Reacciones oficiales y acusaciones

La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, emitió un comunicado en el que aseguró que «Venezuela denuncia provocación militar de Trinidad y Tobago en coordinación con la CIA para provocar una guerra en el Caribe». Además, afirmó que estas maniobras no corresponden a ejercicios defensivos, sino que constituyen una operación colonial de agresión que busca convertir al Caribe en un espacio de violencia y dominación imperial estadounidense.

Según Caracas, estas acciones estarían relacionadas con un plan para generar un conflicto armado mediante una falsa bandera, que podría ser llevada a cabo desde aguas límites con Trinidad y Tobago o desde el propio territorio de ese país o Venezuela. La acusación también apunta a una supuesta alianza entre Trinidad y Tobago y Estados Unidos para facilitar estas agresiones.

Captura de supuestos mercenarios y contexto regional

El gobierno venezolano informó además de la detención de un grupo de mercenarios vinculados a la CIA, que estarían implicados en una operación para desestabilizar al país. La presencia del barco estadounidense en las aguas cercanas a Puerto España fue observada por periodistas de la AFP, quienes confirmaron su visibilidad desde la capital trinitense.

El gobierno venezolano sostiene que este tipo de acciones no son ejercicios militares legítimos, sino una operación colonial de agresión destinada a usar el Caribe como escenario de violencia y control. Caracas acusó a la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, de haber «renunciado a la soberanía» para alinearse con Estados Unidos, transformando el territorio en un portaviones para la guerra en toda la región.

Ante estas tensiones, Venezuela reafirmó su postura de defensa y alertó sobre posibles planes de provocación que podrían derivar en un conflicto mayor en el Caribe y Suramérica. La situación sigue siendo delicada, con las autoridades regionales observando con atención los movimientos militares y diplomáticos en la zona.

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