Testigos del ataque en tren a Londres: “Pensé que era una broma de Halloween”

Atentado en tren de Doncaster a Londres deja diez heridos y dos arrestados

Era una tarde común cuando, a las 7:40 p.m., un tren que partía desde Doncaster con destino a Londres se convirtió en escenario de una escena de pesadilla. En cuestión de minutos, lo que debía ser un viaje rutinario terminó en un grave incidente que dejó a diez personas heridas, nueve de ellas en estado crítico, y a dos sospechosos bajo arresto.

El momento del ataque y el caos en el tren

El convoy, operado por la línea LNER, fue detenido de emergencia en la estación de Huntingdon, en Cambridgeshire. La policía armada irrumpió en el lugar entre sirenas y gritos, en medio de un escenario de confusión y pánico. Los pasajeros aún tratan de comprender cómo un trayecto que parecía normal se convirtió en una pesadilla.

Olly Foster, uno de los pasajeros, relató a la BBC que los primeros segundos del incidente parecían una escena fuera de contexto: “Corran, corran, hay un tipo que literalmente está apuñalando a todos”. En ese momento, pensó que se trataba de una broma de Halloween. Sin embargo, la realidad fue mucho más violenta.

“Mi mano quedó cubierta de sangre que había caído sobre la silla en la que me apoyaba”, relató Foster, todavía incrédulo. En medio del caos, observó cómo un hombre mayor se interpuso entre el atacante y una joven. “El ataque se sintió como si durara para siempre, aunque solo fueron unos minutos”.

Respuesta policial y detenciones

La llamada de emergencia se realizó a las 7:39 p.m., y en cuestión de minutos, la pequeña estación de Huntingdon quedó rodeada por patrullas, ambulancias y dos helicópteros médicos. Los agentes lograron arrestar a dos sospechosos, cuyos nombres aún no han sido revelados. La policía ha declarado que se trata de un “incidente mayor” y que la unidad antiterrorista colabora en la investigación, aunque por ahora no hay indicios de vínculos ideológicos.

El escenario del horror en el interior del tren

Dentro del convoy, el miedo se hizo palpable. Un testigo citado por The Times describió la escena: “Había sangre por todas partes mientras la gente se escondía en los baños”. Los pasajeros bloquearon las puertas, se arrojaron al suelo o intentaron ayudar a los heridos con lo que tenían a mano.

Detención y reacción en la estación

Al llegar a Huntingdon, el horror continuó en el andén. Testigos relataron: “Vimos a un hombre sosteniendo un gran cuchillo después de que el tren se detuvo. Luego lo vimos ser inmovilizado con una pistola táser y reducido por la policía”. Otro pasajero describió que el atacante, un hombre de raza negra, vestido completamente de negro y con capucha, gritaba “¡Al suelo! ¡Al suelo!” antes de ser reducido.

Una persona presente en el lugar, en declaraciones a The Sun, resumió la escena con crudeza: “Había sangre por todas partes, fue una escena horrible, muy violenta. Era como salida de una película, no parecía real, y sembró el pánico a bordo de los vagones”.

Respuesta de las autoridades y estado de las víctimas

Las autoridades desplegaron un amplio operativo policial en toda la zona. La estación permaneció cerrada durante varias horas, y la carretera A1307, que conecta con Huntingdon, fue cerrada al tráfico. Decenas de ambulancias llegaron al lugar, trasladando a las víctimas a hospitales cercanos. Hasta el momento, se confirma que diez personas fueron hospitalizadas, nueve en estado crítico.

Reacciones oficiales y líneas de investigación

Desde el gobierno, la secretaria del Interior, Shabana Mahmood, solicitó “evitar comentarios y especulaciones” sobre los motivos del ataque. Por su parte, el primer ministro, Keir Starmer, calificó el incidente como “profundamente preocupante”.

El superintendente Chris Casey, portavoz de la Policía de Transporte Británica, advirtió que las investigaciones continúan y que, por ahora, no se han establecido vínculos con ideologías extremistas. La colaboración de las unidades antiterroristas refuerza la gravedad del suceso y la preocupación por la seguridad en el transporte público.