Trinidad y Tobago autoriza vuelos militares estadounidenses en sus aeropuertos para lucha contra el narcotráfico

El gobierno de Trinidad y Tobago autorizó vuelos militares de Estados Unidos hacia y desde los aeropuertos internacionales de Piarco y Arthur NR Robinson para las próximas semanas. Esta decisión forma parte de una cooperación bilateral en materia de seguridad entre ambos países.

Las autoridades aclararon que estos movimientos tendrán un carácter logístico y se enmarcan en la presencia militar estadounidense en el Caribe, que ha aumentado significativamente en los últimos meses. La medida fue comunicada por el Ministerio de Relaciones Exteriores, que confirmó que Washington notificó que las operaciones “son de naturaleza logística, facilitando el reabastecimiento y las rotaciones rutinarias de personal”.

## Cooperación en seguridad y diálogo permanente

El ministro de Seguridad de Trinidad y Tobago, Sean Sobers, explicó que la autorización se inscribe en el diálogo permanente con la Embajada de Estados Unidos en Puerto España. Agregó que la medida responde a un compromiso asumido por la primera ministra Kamla Persad-Bissessar, en el marco de esfuerzos por fortalecer la seguridad nacional y regional.

Persad-Bissessar ha reafirmado públicamente que su gobierno apuesta por la colaboración con Estados Unidos para garantizar la seguridad en el país y en la región. La cooperación se presenta en un contexto en el que Estados Unidos incrementó su presencia militar en el Caribe, tras la reciente publicación de la Estrategia de Seguridad Nacional 2025, firmada por el expresidente Donald Trump.

Este documento deja en evidencia las intenciones de Washington de manterer y hacer cumplir la Doctrina Monroe, con el objetivo de restaurar la preeminencia estadounidense en el hemisferio occidental y resguardar su seguridad y acceso en áreas estratégicas.

## Estrategia y objetivos de Estados Unidos en la región

La estrategia indica que Washington buscará impedir que actores externos establezcan capacidades militares o controlen activos estratégicos en la zona. Este enfoque, denominado “Corolario Trump” a la Doctrina Monroe, apunta a mantener la hegemonía en América y prevenir influencias que puedan desafiar su liderazgo.

Dentro de esta política, Estados Unidos trabajará con socios regionales para “controlar la migración, frenar los flujos de drogas y fortalecer la estabilidad y la seguridad en tierra y mar”. La posición geográfica de Trinidad y Tobago, cercano a Venezuela y clave en la región, la convierte en parte fundamental de la estrategia estadounidense.

Las autoridades de Puerto España destacaron los beneficios que ha aportado la colaboración bilateral: participación en ejercicios militares conjuntos, mejoras en vigilancia y acciones contra el narcotráfico que permitieron incautar millones de dólares en drogas. En los últimos meses, efectivos de la 22ª Unidad Expedicionaria de Marines de Estados Unidos realizaron ejercicios con la Fuerza de Defensa de Trinidad y Tobago, además de que el destructor USS Gravely hizo escala en el país.

## Presencia militar y equipamiento en el Caribe

El despliegue de Estados Unidos en la región comenzó con el USS Gravely y otros buques en aguas fuera de Venezuela. Luego, se amplió con un submarino de ataque nuclear, buques anfibios, unidades de fuerzas especiales y el portaaviones USS Gerald R. Ford, que integran el grupo de ataque del navío.

En noviembre, marines estadounidenses instalaron en el aeropuerto Arthur NR Robinson un sistema de radar AN/TPS-80 G/ATOR, diseñado para detectar aeronaves, drones y misiles. La primera ministra Persad-Bissessar confirmó su existencia en una entrevista, señalando que el sistema ayudó en la incautación de drogas, especialmente marihuana, en la región.

Este radar forma parte de la estrategia de vigilancia y control que Estados Unidos busca fortalecer en el Caribe para combatir el narcotráfico y otras amenazas transnacionales. La cooperación, además, refuerza la presencia estadounidense en un contexto de tensión regional y busca consolidar alianzas para mantener la estabilidad en la zona.