Controversia en Lima por el proyecto del Viaducto Las Américas

El Viaducto Las Américas, promovido por la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) a través de la Empresa Municipal de Apoyo a Proyectos Estratégicos S.A. (Emape), busca mejorar la conexión vial entre los distritos de La Victoria y Lince.

A pesar de las promesas de descongestionar el tránsito, la iniciativa ha enfrentado una fuerte oposición por parte de los residentes de la urbanización Balconcillo. Los vecinos argumentan que el proyecto no solo generará un perjuicio ambiental, sino que además no cumplirá con su objetivo principal de reducir la congestión vehicular. La autoridad insiste en que la infraestructura contribuirá a mejorar la movilidad, pero los residentes mantienen su postura crítica.

Detalles del proyecto y su inversión

El proyecto, cuyo costo oficial de acuerdo con la MML es de S/51,3 millones, aunque en el Sistema de Seguimiento de Inversiones supera los 80 millones de soles, contempla la construcción de un viaducto de aproximadamente 2 kilómetros, además de mejoras en las avenidas cercanas. Según Emape, la obra está prevista para comenzar en diciembre de 2023 y concluir en agosto de 2026.

Esta iniciativa ha generado preocupación entre los residentes, quienes denuncian no haber sido consultados previamente. La falta de participación ciudadana fue uno de los principales puntos de alarma para la comunidad de Balconcillo.

Informe de Invermet en 2020 califica al viaducto de inviable

En 2020, durante la gestión de Jorge Muñoz, el Fondo Metropolitano de Inversiones (Invermet), entidad técnica vinculada a la Municipalidad de Lima, emitió un análisis crítico del proyecto. Dicho informe concluyó que el Viaducto Las Américas “no cuenta con sustento técnico que justifique la solución propuesta” y que no resolvería los problemas de congestión vehicular que pretende mitigar.

El informe N° 013-2020-INVERMET/GP-UF señalaba que la evaluación del flujo vehicular era parcial, centrada únicamente en el sentido noreste del tránsito, y que no se presentaron alternativas viables que justificaran la ejecución del proyecto. Como resultado, recomendó su cierre y la formulación de propuestas diferentes.

El análisis también reconocía la oposición vecinal, un aspecto que Emape niega en documentos oficiales, incluyendo la actualización del perfil técnico titulada Creación del Servicio de Movilidad Urbana en el Paso Desnivel Las Américas y Mejoramiento de la avenida De las Américas.

René Rodríguez, presidente del Frente de Defensa de Balconcillo, afirmó a La República que el proyecto fue presentado en 2018, cuando Luis Castañeda Lossio era alcalde de Lima, y aprobado por Emape en ese mismo año.

El dirigente explicó que, pese a las recomendaciones técnicas, las autoridades, incluyendo a Rafael López Aliaga y a Renzo Reggiardo, han ignorado los análisis que señalaban que el viaducto no resolvería los problemas de tráfico en las principales avenidas.

Controversias adicionales: impacto ambiental y legalidad

Los residentes de Balconcillo también cuestionan la legalidad del proyecto y su impacto en el entorno urbano y ambiental. Señalan que el viaducto pasará sobre la berma central, que tiene 14 metros de ancho en áreas verdes, y que implicará la pérdida de árboles en dos cuadras. Además, advierten que la proximidad del viaducto a las viviendas, a menos de 10 metros en algunas zonas, aumentará el tráfico, lo que generará contaminación del aire y sonora.

El presidente del Frente de Defensa de Balconcillo afirmó que estas preocupaciones no han sido atendidas y que la obra, en su estado actual, viola varias leyes ambientales y urbanísticas vigentes.

En medio de estas críticas, la continuidad del proyecto sigue en duda, mientras la comunidad exige mayor participación y una revisión exhaustiva del impacto técnico y ambiental del Viaducto Las Américas.