Madrid.- Un hombre de 72 años mató a sus dos nietos, de 10 y 12 años, en el sur de España tras una discusión con su yerno, y se suicidó cuando agentes de la Guardia Civil ingresaron a la casa, según informaron este lunes a EFE fuentes cercanas a la investigación.
El trágico incidente ocurrió en una vivienda de Huétor Tájar, una localidad granadina de unos 10.000 habitantes.
De acuerdo con las mismas fuentes, uno de los niños murió por asfixia y el otro por un disparo, mientras que el abuelo se quitó la vida también con un arma de fuego.
El hombre se había atrincherado la noche anterior en su casa con una escopeta, realizando dos disparos al aire desde una ventana. Se quitó la vida justo cuando los agentes de la Unidad Especial de Intervención (UEI) de la Guardia Civil ingresaron a la vivienda.
Los agentes especiales, que habían llegado desde Madrid y estado negociando con el hombre, entraron a primera hora de la mañana de hoy al notar que los niños no salían para ir al colegio y al instituto, según explicó el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, a los periodistas.
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En ese momento, los agentes encontraron los cuerpos sin vida de los menores en dos habitaciones distintas: uno con heridas de arma de fuego y el otro sin heridas visibles, según el delegado.
La autopsia determinará las causas y horas exactas de los fallecimientos, aunque fuentes de la Guardia Civil indicaron a EFE que los investigadores creen que los decesos ocurrieron horas antes del hallazgo.
El incidente comenzó la tarde del domingo cuando los vecinos observaron una discusión entre el hombre atrincherado y su yerno, el padre de los niños, en el domicilio.
Tras exhibir un arma, el yerno abandonó la casa y los vecinos, al escuchar la “situación de conflicto”, alertaron al servicio de emergencias 112, que avisó a la Guardia Civil.
El delegado del gobierno confirmó que la esposa y la hija del presunto homicida, abuela y madre de los menores, fallecieron el pasado marzo en un accidente de tráfico cuando el hombre, que conducía el vehículo, sufrió un desmayo, aunque dijo que “esto no es determinante para la investigación de estos hechos”.