Un bombero que ha estado entrando y saliendo de cuidados intensivos con coronavirus durante tres semanas podría irse a casa el martes.
Steve Landon, de 39 años, de Wrexham, y su esposa Becky, una enfermera pediátrica en el Hospital Wrexham Maelor, ambos contrajeron el virus.
Pero mientras ella se recuperaba en casa, su estado empeoró y fue llevado al hospital el 28 de marzo, donde fue llevado a cuidados intensivos tres veces.
Grabó un video el fin de semana desde su cama de hospital agradeciendo al personal del NHS.
«Si no fuera por ellos, puedo decir honestamente que no estaría aquí».
«Impresionante. Simplemente increíble», dijo en el video, que fue publicado en las redes sociales.
Dijo que había logrado algunas impresiones «para el asombro de los fisios y el consultor».
Dijo que el personal que lo cuidaba había sido su «familia» mientras que él no podía ver a su propia familia.
La Sra. Landon dijo que había sido «horrible» y que sus cuatro hijos, de entre 7 y 15 años, lo habían encontrado «realmente difícil».
«Hemos podido mantenernos en contacto [en WhatsApp] principalmente esta última semana o dos, la primera semana estuvo tan mal», dijo.
«Realmente ha sido horrible, no poder estar cerca de él».
«Pero los médicos y las enfermeras han sido increíbles».
La Sra. Landon dijo que mientras su esposo estaría «ansioso» por volver al trabajo, tomaría tiempo.
«Será difícil lograr que se relaje», dijo. Pero esperaba que un jacuzzi, enviado por su madre como un regalo, lo ayudara a recuperarse.